Elecciones. Crucero.

Era el día 22 de Mayo. Mis padres se acercaban al colegio electoral que les habían asignado. Estaban realmente preocupados por su hija, la que viajaba con sus compañeros a Trinidad, en el Caribe, y después de doce días, no había dado señales de vida (albergaban la esperanza de que estuviera disfrutando tanto allí que no se hubiera molestado en llamarlos, pero preferían no pensar que podía haberse caído el avión, y que su adorada hija estuviera perdida o quizás algo peor). Fueron caminando lentamente, no había prisa, era demasiado pronto para que las mesas estuvieran llenas. Buscaron con la mirada los sobres electorales, para elegir un partido o votar en blanco. Nunca me decían el partido que habían elegido, pero al fin y al cabo, el voto era secreto.
Allí había también había otros partidos (aparte de los más mencionados) como Agrupación Socialista de Chanmartín, Comunión Tradicionalista Carlista, Falange Española Nacional Sindicalista, Falange Española Independiente, Fundación Madrileña Para el Desarrollo y el Progreso o Izquierda Republicana. Supuse que estos pequeños partidos no serían votados por mis padres, pero no creo que lo llegaré a saber.







Un extraño sonido nos llegó desde lejos, no era un sonido natural, más bien artificial. La isla ardía, y desprendía un espeso humo negro. De nuevo, ese sonido, y seguidamente, un compañero se echaba a las cálidas aguas señalando un barco en el horizonte del este de la isla. Nos abrazamos, chillamos, saltamos, y lloramos de alegría. Un gran crucero había avistado las llamas.
Vinieron a recogernos tres botes, y cuando llegamos a bordo, el capitán habló con nosotros. Aunque era un barco francés, el capitán se manejaba bastante bien con nuestra lengua, y dio un aviso a las autoridades españolas afirmando lo que habían encontrado, con todos y cada uno de los detalles que le transmitimos.
Era el día 22 de mayo. Recogimos pocas de nuestras pertenencias llenas de arena. Lo único que yo tomé era la radio, y una pequeña botella de arena de la isla. Nunca olvidaría aquella experiencia, pero por suerte, estábamos a salvo.

Aquella noche me pregunté quien habría ganado las elecciones en Madrid, pues durante estos trece días las había estado siguiendo, pero cuando nos dieron de cenar un estupendo banquete, me olvidé por completo. Por fin comida en condiciones, no fruta, fruta y más fruta...

Llegamos a un puerto en Galicia, donde las autoridades españolas habían solicitado que nos dejara el barco y desde allí , en avión, nos llevaron a Madrid.

Aterrizamos a las dos y media de la madrugada, por lo que el aeropuerto estaba completamente vacío. Salimos, y como no teníamos equipaje, fuimos directamente a el lugar donde nos recogerían, y allí, vi a mis padres. Sonreí, hacia dentro y hacia fuera, y una lágrima se escapó de mis ojos. Fui sin corriendo sin más demora a darles un abrazo. Me abrumaron los sentimientos. Los había añorado muchísimo. Estuvimos fundidos en ese abrazo durante largos minutos, y lagrimeando, nos fuimos por fin a casa.


El Partido Popular había ganado en la mayor parte de España, y de nuevo en Madrid, el alcalde sería Alberto Ruiz Gallardón, y la presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre. Pero ya bien poco me importaba. Estaba con los seres que quería, y no necesitaba más.

Fuego.

Aquel día probamos durante toda la mañana las señales de reflejos solares, pero acabamos cansados, y decidimos tomar la segunda alternativa.
Apilamos la fruta que pudimos recoger en poco tiempo para prender cuanto antes la isla, y con un poco de tristeza, apilamos los refugios, que sería lo que mejor prendería, y los dejamos quemar. Vimos como ardía nuestro pequeño paraíso, y esperamos con todas nuestras esperanzas, a que apareciera un barco por el horizonte.

La Última Carta.

Mi madre abrió la carta de IU, y desalentada, empezó a leer.

Las propuestas de este partido eran tales como hacer cambios en la Fiscalidad, Vivienda, Empleo,Seguridad y Movilidad, Modelo Urbano, Igualdad, Servicios Sociales, Medio Ambiente o Cultura y Juventud. También alentaban a la población a votar a su partido en las elecciones del 22 de Mayo, pero tras leer la primera línea, mi madre rasgó la carta por la mitad y la echó a la basura con el resto de cartas.
Los candidatos principales en este partido eran Gregorio Gordo, a la Asamblea de Madrid, y Ángel Pérez, a la alcaldía.

Ángel Pérez

Gregorio Gordo

Mi padre la miró con gesto sorprendido, pero no hizo ningún comentario.

Los Espejos o el Fuego. Radio.

Esa mañana me desperté la primera. Como apenas había salido el sol, me quedé en el refugio, pero no conseguía conciliar el sueño, ya que la luz no era demasiado fuerte para poder ver con claridad, pero había suficiente como para no poder conciliar el sueño. Además había algo que me inquietaba.
Llevábamos más de una semana en la isla, pero no había oído una sola noticia acerca de un avión perdido, ni la desaparición de veintisiete niños. ¿Qué ocurría? ¿Porqué no nos estaban buscando? Empecé a preocuparme por si tendríamos que permanecer mucho más allí, y tendríamos que hacer algo para que nos rescatasen. Me levanté, y tropecé sin querer con mi compañera de refugio. Salí de este y me dirigí a la hoguera. Cogí el palo para atizarla, y me quedé observando la llama que surgía de este, y un humo oscuro también procedía de lo chamuscado. ¡Claro! Lo que necesitábamos era una gran señal de humo, pero cómo no se nos había ocurrido antes, esa era una buena pregunta. Manteníamos la hoguera encendía por si pasaba un barco o un avión, pero la señal era demasiado débil. Pero, incendiar toda la isla... Eso no lo podríamos hacer, además, si la idea fracasaba, no podríamos continuar allí. Era bastante poco probable que la señal no se advirtiera, pero arriesgarnos podría acarrear graves consecuencias.
Entonces recordé un episodio de "El Último Superviviente", un aventurero al que soltaban sin más que un cuchillo y una cantimplora vacía y se enfrentaba a los peligros de algunos parajes insólitos y peligrosos.
En este episodio, este hombre estaba perdido en una isla desierta, y con su cuchillo hizo durante un rato señales solares, hasta que fue rescatado por un barco.
Las maletas estaban llenas de utensilios de aseo, por lo que fue fácil encontrar numerosos espejos. Ya había amanecido cuando agrupé unos trece, y mis compañeros ya se habían levantado. Observaban la agrupación de espejos, y les expuse mi preocupación por la larga estancia en la isla, la idea de prenderla fuego y la de hacer señales con los espejos.
Decidimos que lo mejor sería hacer señales con espejos para no arriesgarnos a quemar la isla y perderlo todo, y si no funcionaba, nos tendríamos que exponer a hacer la gran señal de humo.
Buscamos todos los espejos posibles y los agrupamos con cuidado en un montón. En total había treinta y siete pequeños espejos de neceser. Nos las arreglamos para atarlos y montamos un extraño gran espejo. Lo movimos cuidadosamente hasta encontrar el reflejo del sol, y esperamos.
La espera se hizo eterna, nos turnábamos para sostenerlo mientras que los demás iban a descansar.
Poco a poco, fue cayendo la noche, y con una gran decepción, nos reunimos alrededor de la hoguera.
Teníamos el dilema de seguir con esta señal o empezar a quemar la isla. Decidimos que haríamos la señal, pero si al día siguiente no nos recogían, haríamos la señal de humo.

Esa noche sí escuché la radio. No hubo más noticias que las siguientes:

-Los candidatos de UPYD visten de ""ciudadanos comunes" y conversan con los vecinos de la Comunidad de Madrid con la estrategia de convencer "a pie de calle" y alcanzar el 5% necesario para conseguir representación.

-Gallardón se compromete a reformar Goya, que perderá un carril para el tráfico, y Mayor. Peatonalizará Carretas, la travesía de Arenal y Bringas, Cuchilleros, Cava de San Miguel y el entorno de Conde Duque. Las tarifas de parquímetros se regirán por la contaminación y el bus podrá pagarse con el móvil.

-Aquirre ofrece 10 nuevos centros y 5000 plazas para las personas mayores, así como nuevas unidades para Alzheimer y Parkinson.

-Lissavetzky apuesta por un plan basado en la tecnología y la innovación para convertir a Madrid en la ciudad de la Ciencia.

-Una de las razones más por la que la concentración que se ha convertido en acampada en Plaza Sol es por la lucha contra la subida de tasas de la complutense, con las que el coste de matriculación será mayor.

No, esta noche tampoco había noticias de aviones o niños desaparecidos, pero los políticos seguían ofreciendo más y más propuestas para ser votados.

La Tercera Carta.

Cuando mi madre terminó de leer la carta de la propaganda del PP, mi padre ya había abierto un sobre rosa, que contenía la propaganda de Unión Progreso y Democracia, y la empezó a leer en alto:

Respetados Ciudadanos:
Tengo el placer de presentaros el programa del nuestro partido para las elecciones del 22 de mayo en la Comunidad Autónoma de Madrid. Este ha sido elaborado entre nuestros afiliados, simpatizantes y voluntarios.
Queremos que con este Programa entren los ciudadanos en las instituciones de la Comunidad de Madrid y con ellos conceptos como la transparencia, el control y la rendición de cuentas, la ética o la austeridad. Queremos hacer realidad la responsabilidad del político ante el ciudadano, algo que está también olvidado.
Queremos una Comunidad de Madrid más democrática, con limitación de mandatos, sin mayorías
absolutas, sin populismos que cuestan mucho dinero al contribuyente, sin corrupción.

Luis Velasco Rami

Queremos una Comunidad de Madrid que sea capaz de implantar políticas que  favorezcan la creación de puestos de trabajo y de nuevas empresas.
Queremos una Comunidad de Madrid más justa, con mayor equidad en la distribución de la renta.
Nuestra Comunidad es una de las más injustas de España. Los insuficientes recursos públicos dedicados a sectores como la enseñanza, la sanidad y la dependencia son, entre otros factores,
causa de ello.
Le llamamos a votar y a hacerlo de una manera meditada y beneficiosa. Eso es, para UPYD, el  verdadero voto útil. Entendemos que ese voto útil es para nuestro partido, el único que es una alternativa, algo nuevo, y no una alternancia, es decir más de lo mismo.
Reciba un cordial saludo,
Luis Velasco Rami


Con un suspiro, mi padre dobló la carta y la guardó en su sobre, hizo un comentario no muy determinativo que en realidad no indicaba su opinión sobre el partido y alentó a mi madre para que leyese la última carta.