Golpe de Estado. Caso Bildu.

La situación estaba llegando a un punto crítico. Que Juan nos dijera lo que teníamos que hacer para que organizarnos mejor era una cosa, pero obligarnos a traerle comida, hacerle un refugio propio e individual, hablarnos de forma bastante poco educada e incluso decirnos que nos mantuviéramos lejos de todo lo que habíamos recogido del barco y él consideraba como suyo, era una cosa bastante distinta. No nos dejaba comer hasta que él no se hubiera hartado de fruta, y cuando lo hacía, se echaba a dormir. Cuando intentamos hablar con él giró la cabeza y se fue por la orilla hasta la otra punta de la isla. Cuando regresó, le estábamos esperando. La dos horas que se ausentó nos reunimos todos los compañeros, afirmando que Juan se estaba pasando de la raya, que esto era insufrible e incluso que habíamos llegado a una dictadura, ya que el jefe no nos escuchaba, hacía lo que le convenía y se tomaba las libertades que quería sin hacer trabajo alguno.

Su rostro fue de sorpresa al vernos plantados ante a sí, y cuando se quiso dar la vuelta, ya estaba rodeado por los demás compañeros. Con gestos de excusa y ojos de terror, comenzó a pedir disculpas, diciendo que el poder se le había subido a la cabeza y  que no teníamos derecho. Al ser bastante menudo, los compañeros más fuertes de la clase lo cogieron sin problema, y lo ataron a un árbol con varias ropas unidas. Decidiríamos lo que ocurriría por la noche, que estaba al caer, pero antes fuimos a recoger fruta para saciar nuestro apetito.

Ya comiendo, mientras decidíamos como manejar la situación del golpe de estado tras la que quedaríamos sin jefe, surgieron varias ideas. El nuevo jefe de la isla se comprometería a escuchar las decisiones del resto de compañeros, ayudaría a las tareas en las que faltara personal o en las que surgieran problemas y se encargaría de llevar la cuenta de los días. Fue así como se estableció la siguiente lista para la convivencia y supervivencia en la lista:

-El jefe debe escuchar al resto de compañeros, y cada noche se celebrará una asamblea, en la que se tratarán los problemas que hayan surgido, y en caso de que no haya ninguno, para estar reunidos y en compañía.
-La organización en grupos para las tareas de: recogida de alimentos, manutención del fuego, atención a los que resultaran heridos, buscar agua y otras tareas que surjan hasta que nos rescaten. Todos los días habrá un grupo que descanse, y se puede ocupar de las tareas que le apetezcan o relajarse.
-Las tareas rotaran, al igual que los grupos, que cambiarán de integrantes según las preferencias.
-La comida no consumida en el día se almacenará para ingerirla el día siguiente y no acabar con el sustento de toda la isla en poco tiempo.
-Los domingos no se realizarán tareas, y se consumirá la comida almacenada o recogida del árbol.
-Se recogería leña seca todos los días para mantener un fuego oscuro y constante para cocinar algunos alimentos y mandar señales a los rescatadores.
-El compañero que no realice sus tareas por no querer será exiliado durante un día, y decidirá él mismo si quiere volver.

Antes de ajusticiar a Juan, debíamos elegir quien sería el nuevo jefe, y llegamos a la conclusión de que todos seriamos opciones acertadas, así que hicimos un sorteo. Dio la casualidad de que salió mi número, y con un poco de pesar, me levanté y pedí la opinión de los compañeros. Como nadie puso objeciones pedí a un compañero que fuera a buscar a Juan, para comenzar el juicio.

Fue una sentencia rápida, ya que estábamos de acuerdo en lo que había que hacer. Cuando le dimos su veredicto asintió y se fue arrastrando los pies y con la cabeza gacha. Supongo que si me dijeran que tendría que estar sola durante tres días como exilio, esa sería mi reacción.

Aquella noche no escuché la radio, pero me perdí muchas importantes noticias como estas:

-El PP ha conseguido la "mayoría absoluta" en las redes sociales, los candidatos del PP están muy por encima del resto en este apartado. Sólo Esperanza Aguirre ha conseguido entre Facebook y Twitter más votos que la suma de los candidatos del resto de la comunidad. Las redes sociales también han emitido el primer debate entre los distintos partidos como el PP, PSOE o IU. Durante una hora los candidatos de estos partidos respondieron a las preguntas formuladas por los ciudadanos a través de Twitter o Facebook.

Noches anteriores, había escuchado mencionar algo sobre el caso Bildu, tema en el que estaba realmente interesada ya que este partido político del que se especulaba que tenía influencia etarra, quería presentarse a las elecciones en el País Vasco, y el dilema de permitir si podrían presentarse estaba en manos de los magistrados. Por eso, a la noche siguiente me arrepentí de no haber podido escuchar la siguiente noticia:

-La sentencia del Tribunal Constitucional (TC) que permite a Bildu presentarse a las elecciones que aun no se han celebrado pero están causando muchos comentarios, tales como que no forma parte, técnica y constitucionalmente, del Poder Judicial. El TC restablece en su sentencia el derecho a la participación de Bildu. El derecho de Bildu a concurrir  a las elecciones se basa en 13 fundamentos jurídicos. El último dice textualmente: La simple sospecha no puede constituirse en argumento jurídicamente aceptable para excluir a nadie del pleno ejercicio de su derecho fundamental de participación política. Es decir, el derecho a la participación es un derecho fundamental. Lo que ocurre es que al hablar de "sospecha" previamente se han refutado las pruebas del Supremo que convertían tal sospecha en un hecho probado. También los magistrados han alegado que  es posible que en el futuro las sospechas queden confirmadas pero por ahora, no lo están.

La noticia continuaba con los casos favorables al caso Bildu, pero también se quejaba de la poca falta de atención en hechos casi comprobados. Yo pensaba que Bildu tenía derecho a presentarse a las elecciones ya que este es un derecho constitucional, y las decisiones de los Magistrados me parecieron correctas, pero, no sé, teniendo en cuenta que había sospechas, yo habría tomado más en consideración mi decisión, ya que esta podría acarrear consecuencias muy importantes. Por otra parte, hubo otra noticia acerca de un expresidiario que había sido condenado por etarra, y recién salió de la cárcel, estuvo apoyando con pancartas y gritos a Bildu. Sinceramente no sabía que pensar, y además, otras cosas con más prioridad para mí se me pasaban por la cabeza, por ejemplo, cómo diablos íbamos a salir de esa isla.
Tengo que aclarar que aunque esa noche no escuché la radio, supe que estas habían sido las afirmaciones del locutor ya que las noticias de los días siguientes comentarían este tema en repetidas ocasiones.

La Segunda Carta

Fue mi madre la que leyó esta carta, sacada de un sobre azul, con un gran logo del PP.
Raspándose un poco la voz, mi madre leyó en voz alta la introducción de la carta, firmada por Mariano Rajoy, presidente nacional del partido popular, que apoyaba a sus compañeros de partido, y ya de paso, hacía un poco de publicidad para su campaña.

Estimados amigos:
Los últimos años están siendo muy complicados para la sociedad española. Todos los españoles estamos pasando por dificultades a causa del gobierno socialista, (¡Qué bien, ya que estamos, critiquemos a la oposición!- dijo mi madre indignada por esta afirmación) que no ha sabido gestionar nuestra economía con eficacia. Es necesario un cambio de gobierno urgente. Necesitamos políticas creíbles, responsables y eficaces que reactiven nuestra economía y hagan empleo fomentando la igualdad.
Ofrecemos una alternativa de recuperación para salir de la crisis y asegurar el futuro de prosperidad y empleo que merecemos.
Pido su voto para los candidatos del Partido Popular en las elecciones del 22 de mayo para devolver la esperanza a los españoles.
Muchas Gracias.

Mariano Rajoy.


Mi madre dio la vuelta al papel, y ahí aparecieron dos caras conocidas, la de Esperanza Aguirre (Candidata a las Elecciones Autonómicas y actual presidenta de la Comunidad), y la de Alberto Ruiz Gallardón (Candidato a la alcaldía de Madrid y actual alcalde de esta comunidad), al que nos encontrábamos muchas mañanas paseando al perro en un parque cercano a casa.

La carta de Esperanza Aguirre decía así:

El 22 de Mayo se celebran las Elecciones Autonómicas de la Comunidad de Madrid, y tengo el honor de encabezar la lista de candidatos del Partido Popular. Y, al mismo tiempo, con un programa electoral lleno de propuestas y proyectos para que Madrid siga siendo la primera Comunidad Autónoma de España.
Los integrantes del PP hemos cumplido nuestros compromisos, y ahora nos presentamos con más proyectos para mejorar nuestra vida cotidiana. Por eso les pedimos su voto. No defraudaremos su confianza, puede estar seguro.
Esperanza Aguirre Gil, Candidata a la Presidencia de la Comunidad de Madrid.


La de Alberto Ruiz Gallardón era la siguiente:

El 22 de mayo afrontamos una gran responsabilidad. Tenemos la posibilidad de superar la crisis, crear empleo y futuro para los jóvenes. Hemos modernizado las infraestructuras y servicios públicos, y ahora tenemos en mente un nuevo proyecto público.
Queda mucho por hacer, Madrid no mantendrá sus logros sino renueva el impulso que los hicieron posibles, por eso, pido vuestra colaboración para seguir mejorando las calles, plazas, polígonos industriales, zonas comerciales y residenciales, y crear puestos de trabajo y ofrecer posibilidades profesionales a cada ciudadano. Respaldar al Partido Popular es construir un futuro para Madrid y para España.
Alberto Ruiz Gallardón, Candidato a la Alcaldía de Madrid.

Reparto de Tareas. Toma la Calle

A la mañana siguiente, como Juan nos había dicho, comenzamos a organizarnos. Según las directrices del jefe, unos iríamos a buscar fruta, otros construirían los refugios, otros se encargarían de buscar agua, y los demás mantendrían el fuego encendido. Antes de comenzar nuestras tareas, Juan nos informó de que al haber estado toda la noche pensando, estaba muy cansado y necesitaría descansar de sus tareas de jefe, pero sin embargo llevaría a cabo una importante labor, la de contar los días que llevábamos en la isla. Consideré las tareas que se había asignado así mismo, y me parecieron terriblemente escasas. Por otro lado, a la noche él no había dado señales de estar despierto, lo cual me pareció raro, ya que yo había permanecido despierta y sin embargo no estaba cansada a pesar de no haber dormido.

Amontonamos la fruta a la sombra, junto a una piedra, y fuimos a ayudar a los de los refugios, que al parecer no llevaban muy bien la tarea de construcción. Juan, sin mover un dedo, gritaba a sus compañeros, y estos le decían que ayudara también, pero se negó, alegando que esas tareas no eran propias de un jefe.

Aquella noche, Juan cenó aparte, necesitaba tiempo para pensar, decía. Llevamos una charla llena de propuestas para hacer señales a nuestros posibles rescatadores, y cuando se las ofrecimos a Juan, sin decir una palabra, negó con la cabeza, se dio la vuelta y se fue a dormir. Cuan extraña conducta, me dije, pero no comenté nada. Nos quedamos hablando a la luz de la lumbre, y poco a poco mis compañeros se fueron quedando dormidos. Yo sin embargo me quedé un rato despierta, escuchando la radio.
Esa noche tampoco había noticias sobre un avión perdido. Pero la radio daba las siguientes noticias:

-La manifestación iniciada ayer día 15 de Mayo ha provocado un asentamiento de la juventud en la Puerta del Sol, con el lema Democracia Real YA. Se han echado a las calles para quejarse del sistema político, el paro, el bipartidismo vigente, la falsa democracia o la falta de atención a la opinión de los ciudadanos. Lo que primero fue una concentración convocada por las redes sociales se ha convertido en revueltas sociales es países de todo el mundo, como Inglaterra, Alemania, Francia, Grecia e incluso también en Argentina. Acusan a los poderes políticos y económicos de nuestra precaria situación y exigen un cambio de rumbo. Sostienen que no debemos votar a los partidos políticos con mayor poder, y sugieren otras alternativas. Han convocado a todos los ciudadanos a acercarse a la concentración, no somos mercancía en manos de los políticos y banqueros, dicen. Animan a unirse a la ciudadanía para hacer que se escuche una sola voz.


Por supuesto la manifestación era una noticia mucho más amplia que no cabía en tan solo un reportaje, a lo largo de los días siguientes descubriría que acudieron la Puerta del Sol mas de 16 mil personas, y las soluciones y sugerencias que se mencionaban en el reportaje eran muy poco explícitas.
Para alguien que se hubiera informado bien, sabría que la manifestación pedía las siguientes cosas:

-Eliminación de los privilegios de la clase política (reducción de los cargos de libre designación, publicación del patrimonio de todos los cargos públicos, imprescriptibilidad de los delitos de corrupción, eliminación de inmunidad  asociada al cargo...)

-Contra el desempleo (reparto del trabajo fomentando las reducciones de jornada, jubilación a los 65 años y ningún aumento de la edad de jubilación hasta acabar con el desempleo juvenil, bonificaciones a empresas con poca contratación temporal, seguridad de empleo-sin despidos colectivos, causas beneficiarias...-y subsidios de 426 euros para los parados)

-Derecho a la vivienda (ayudas de alquiler para jóvenes y personas de recursos bajos, entrega de pagos para cancelar hipotecas...)

-Servicios públicos de calidad (contratación de personal sanitario hasta acabar con las listas de espera, fomentación de grupos de desdoble con la contratación de nuevo profesorado, grupos de apoyo, reducción de coste de la matrícula, transporte público barato, ecológico y sostenible...)

-Control de las entidades bancarias (las entidades en posición de quebrar deben ser nacionalizadas o quebar, pero no recibir rescate alguno, elevación de impuestos de la banca, prohibición de inversión de bancos españoles en paraísos fiscales...)

-Fiscalidad (recuperación del impuesto sobre el patrimonio, control real y efectivo sobre el fraude fiscal y la fuga de capitales a paraísos fiscales...)

-Libertades ciudadanas y democracia participativa (abolición de la Ley Sinde-no al control de internet-, libertad y protección del periodismo de investigación, referéndums  para las cuestiones importanres que modifican la vida de los ciudadanos, democracia interna en los partidos políticos...)

-Reducción del gasto militar.

La Primera Carta

La primera carta que mi padre leyó era la del Partido Socialista, y en su interior se encontraban las propuestas de dos candidatos, Jaime Lissavetzky y Tomás Gómez.

Jaime Lissavetzky se presentaba como primer candidato a la alcaldía de Madrid, y Tomás Gómez, a presidente de la Comunidad. Por supuesto había más candidatos de este partido, pero las propuestas iban firmadas por estos dos individuos. Dentro del sobre había otros dos, uno blanco (que serviría para introducir el partido político que uno eligiera para la alcaldía) y otro de un naranja salmón (en el que se metería el voto al partido político elegido para gobernar la comunidad). El inconveniente era que tú elegías al partido político que decidieras, pero no al representante de este, por lo tanto, ¿Esto era una democracia real? No, en mi opinión no lo era porque si así lo fuera también se podría elegir al candidato que cada uno prefiriera para gobernar tu partido político preferido.

La primera carta decía lo siguiente:

Queridos vecinos de Madrid:

Jaime Lissavetzky

Como saben, el 22 de mayo se celebran las elecciones municipales. Los madrileños podrán elegir al alcalde para los próximos cuatro años. Vuestra decisión es muy importante ya que marcará nuestro futuro y el modelo de gobierno y la vida diaria de todos estará condicionada por esta decisión.

No debemos resignarnos a aceptar una política que está generando una gran deuda, despilfarrando dinero público, abandonando los barrios y distritos de la ciudad, reduciendo los servicios básicos…

Es necesario para el desarrollo de nuestra ciudad una buena, sensata y responsable gestión de sus recursos, bajas hipotecas equilibrio social, territorial y medioambiental de la ciudad, creación de empleo y una eliminación de la Tasa de Basuras. Ese es mi firme compromiso.

Quiero ser el alcalde de Madrid, y para ello necesito y espero contar con vuestro voto.

Jaime Lissavetzky.

La de Tomás Gómez vino a continuación:

Tomás Gómez

El próximo 22 de mayo, los madrileños deciden su gobierno autonómico, que será responsable durante los próximos cuatro años de la sanidad pública, la educación, los servicios sociales, la creación de empleo la vivienda, el transporte o el medio ambiente. Es decir, las que afectan a nuestra vida cotidiana.

Me propongo gobernar con transparencia, austeridad y proximidad. Tu voto es vital para impulsar a la recuperación económica y la generación de empleo, para seguir avanzando en igualdad y para garantizar la protección social y el estado de bienestar.

Me comprometo a ser tu presidente, el presidente de las personas como  tú, que se esfuerza cada día. Gracias por atenderme.

Tomás Gómez.

Elecciones en la Isla, y algunas noticias

La primera noche en la isla no fue fría. Conseguimos hacer fuego fácilmente. Nos hallábamos ya junto a la pequeña hoguera, con las cabezas gachas, cuando decidimos lo que había que hacer. Necesitábamos organizarnos, establecer unas normas no muy estrictas que seguir hasta que llegara el rescate. Decidimos hacer unas simples elecciones presentando cada unos sus ideas y mejoras para la convivencia en la isla, y casi todos coincidimos que el jefe sería Juan, nuestro pequeño Juanito, un muchacho menudo e inteligente, que se llevaba bien con todo el mundo. Entendía muy bien las cuestiones políticas, y cuando le elegimos definitivamente escuchó de nuevo todas y cada una de las propuestas que le ofrecimos, y un poco más tranquilos, el resto de mis compañeros se fueron quedando dormidos.

Yo por mi parte permanecí despierta, no podía conciliar el sueño, me quedé un rato pensando hasta que por fin me levanté y me dirigí a tientas a una de las maletas en las que había guardado la radio. La encendí y escuché atentamente las noticias. Ni una sola sobre la desaparición de un avión con veintisiete niños a bordo. Pero advertí que las noticias le dedicaban bastante tiempo a emitir como los políticos echaban en cara a la oposición las cosas que habían hecho mal, resaltando es sus discursos las hazañas de su mismo partido.

Recuerdo la voz de Alberto Ruiz Gallardón, candidato a la alcaldía del Partido Popular, diciendo lo siguiente:

-Siempre me he quedado donde me han colocado los ciudadanos, las encuestas favorecen mi candidatura, y jamás he puesto en mi programa electoral algo que no pueda cumplir. La gran tarea de esta legislatura es la creación de empleo.

El locutor siguió informando de la noticia, y después vino otra a la que presté mas atención:

-Medio millón de jóvenes entre 18 y 24 años optan por la abstención. Los jóvenes universitarios han mostrado su falta de interés por las cuestiones políticas (según las encuestas). Su desencanto se refleja en las urnas. Según esto, la juventud es el rango de edad de más abstinencia. Para los jóvenes que si votan, el PP es el favorito, seguido por el PSOE.

Según mi parecer, esta noticia no tenía sentido alguno, ya que según otras noticias que había escuchado, una gran masa de ciudadanos de todas las edades, pero en especial jóvenes, se habían echado a las calles para manifestarse, y acampado en las plazas más importantes de las ciudades, por lo tanto, la razón de la abstinencia no era por desinterés, sino por falta de opciones favorables para el pueblo a las que votar, pero claro, eso era tan solo según mi parecer.

Noticias-0. Cartas-4

Y a unas cuatro mil millas náuticas de esa pequeña isla, mis preocupados padres, que me habían dejado en el aeropuerto junto con mis amigos, esperaban recibir una llamada, o un mensaje, o algo relacionado con nuestra llegada. Pero nada. Aquella tarde tan solo recibieron cinco cartas. Una de ellas, una carta del banco. Las cuatro restantes eran las propuestas electorales de los cuatro partidos políticos más importantes, o por lo menos, los que podían permitirse enviar a los buzones de los ciudadanos la propaganda electoral para las elecciones autonómicas y municipales, pagada en parte por los ciudadanos (cosa que me parecía totalmente injusta ya que el pueblo no tenía por que pagar la propaganda de partidos a los que ni siquiera iban a votar). Estos partidos eran los siguientes:

-Partido Socialista (PSOE)

-Partido Popular (PP)

-Izquierda Unida (IU)

-Unión, Progreso y Democracia (UPYD)

Por supuesto mas de cincuenta partidos políticos se habían presentado a estas elecciones, pero los mencionados eran los que encabezaban las encuestas realizadas por los medios y el gobierno.

El día de las urnas estaba convocado para el 22 de Mayo, y la gente quería informarse un poco más sobre las propuestas de los distintos partidos, razón por la cual no hubo noticia alguna sobre la desaparición de un barato avión con destino a una isla que a pocos interesaba.

Todavía no había razón ni motivo para asustarse ni temer por la vida de su hija, así que esta pareja abrió una por una las cartas recibidas, y leyendo un poco por encima las propuestas, fueron decidiendo su voto secreto.

Destino: Trinidad

Lo primero que oímos fue un fuerte PUM, el mismo que despertó los viajeros que se habían quedado dormidos durante la travesía, y después, gritos. Los pasajeros que se encontraban junto a las ventanas de la derecha miraban aterrorizados el ala del avión, y un humo negro salía del mismo motor.

La mayoría de los pasajeros éramos niños, en concreto veintisiete, en un viaje de despedida del instituto, rumbo a la isla caribeña de Trinidad. Solíamos ser treinta y uno, pero los cuatro rezagados no tenían permiso para acompañarnos, pura suerte, sino, se encontrarían  en el avión en el momento en que por un fallo técnico saltó una chispa y comenzó a arder el motor derecho...
El resto de pasajeros eran los profesores que nos acompañaban, y otras personas  que no conocía, y a decir verdad, no me interesaba conocer, y menos en ese momento. Puesto que la embarcación era pequeña (y nuestro presupuesto bajo, por lo tanto, barata) no había mas tripulantes.

El avión dio una sacudida y sobre nuestras cabezas se encendió una luz verde "Abróchense los cinturones" dijo una voz y acto seguido las mascarillas de oxígeno salieron del techo.
Vimos como caíamos al mar a una velocidad vertiginosa. Solo se oían gritos y chillidos de espanto, y con fuertes forcegeos, el piloto trataba de elevar el avión, para que la caída no fuese del todo mortal.


No se como, y me temo que no lo llegaré a saber, pero la mañana siguiente me desperté, no sin un fuerte dolor de cabeza, sobre mi asiento del avión. Oía algún que otro gemido, y me incorporé. Un tumbo atacó mi cabeza, y por un momento mis ojos se nublaron, pero seguí buscando a alguien más con vida. Mis ojos se cruzaron con una ventana, y frente a ellos, una playa de arena blanca y fina, desierta, pero al fin y al cabo, estábamos a salvo en tierra.

La lista de supervivientes se reducía a veintiséis personas. Todos niños. Los cuerpos del piloto y copiloto yacían cubiertos de sangre y cristales. Los cuerpos de las azafatas los encontramos inertes sobre el suelo del avión, con distintas contusiones sobre el cuerpo, y el resto de adultos habían muerto en un intento de salvarnos la vida. Pero éramos veintiséis. Un compañero había desaparecido. Nunca lo llegamos a encontrar.

Hicimos un último recuento e inspeccionamos el avión. Todo lo útil lo sacamos a la playa, pero la comida que encontramos la dejamos en el avión para evitar que se calentase y estropease.
En una pequeña maleta encontré una pequeña radio que por suerte tenía pilas, y con una bolsita de plástico con más pilas dentro para recambio.
No se cómo llegó a ocurrir pero capté una frecuencia española. Apagué inmediatamente la radio. Necesitábamos saber si nos estaban buscando, y para ello la radio tenía que funcionar. Era nuestra única esperanza.